Hace unas semanas viví una experiencia inolvidable: me certifiqué como instructor de firewalking (andar por las brasas). Gracias a la labor, iniciativa y emprendimiento de nuestos compañeros de D’arte Formacion: Enrique Jurado, Beatriz García Ricondo y Adelina Ruano, tuvimos la suerte de tener en España por primera vez, desde EEUU, a la institución que creó el concepto del firewalking como instrumento pedagógico, además de muchas otras actividades:
El “firewalking institute”, que llegó con todo el equipo (y nunca mejor dicho) desde Texas.
Y ¿qué decirte? Que es una experiencia completamente transformacional, porque es eso, precisamente: una experiencia, algo que vives, y ¡no te imaginas de qué forma!. Yo ya había pasado las brasas con Robbins y aquí en España con Santiago Aldekoa, y había también partido una flecha con la garganta (donde tuve casi pánico). Y por ello sé del increíble poder de una experiencia de este tipo para cambiar, para romper creencias que nos estaban limitando (y que es la quintaesencia del cambio real, hacia un futuro sin límites) .Pero ahora se trataba de convertirse en instructor de ello. Y esto implica pasar por la experiencia tú primero, claro.
Y ¿qué te parecería si después de 3 días….